La industria del videojuego está pasando por uno de los períodos de saturación más grandes de toda su historia. En el mercado de este medio se encuentran una cantidad ingente de juegos que duran una cantidad ingente de horas, haciendo imposible probar todos los títulos publicados. Las nuevas exigencias de los usuarios han logrado que las obras que se publican actualmente tengan un cariz filosófico y existencial a nivel narrativo como nunca antes en este medio. Entre tanto título profundo y extenso que, inevitablemente, tiene tramos aburridos y monótonos, se publica Warhammer 40k: Space Marine 2, un shooter en tercera persona que ofrece, sin trampa ni cartón, acción desenfrenada a martillazo y balazo limpio.
Desde Saber Interactive, los desarrolladores de Space Marine 2, han sabido cubrir las necesidades de los jugadores, unas necesidades de cuya existencia se habían olvidado. No ha sido hasta tener esta secuela en nuestras manos que hemos recordado que requerimos de juegos directos y concisos que ofrezcan una experiencia clara y, que mejor experiencia que asesinar a hordas de enemigos con espadas, armas a distancia o granadas y presenciar explosiones estelares y combates apoteósicos.
Lo que hace Space Marine 2 es introducirnos en una ambientación como es Warhammer 40k y, en su modo campaña, plantearnos una historia que hace alusión a diversos elementos de su predecesor y del universo Warhammer, lo que puede parecer abrumador. Pero no hay nada de qué preocuparse, pues pronto las dudas se convierten en frenesí y la trama se convierte en algo completamente independiente incluso sin conocer nada sobre Warhammer ni haber jugado al anterior título aunque, claro está, el juego se vuelve muchísimo más disfrutable si conocemos la historia de Space Marine.
Titus, el protagonista de Space Marine 1 y 2, antes capitán (ahora teniente) es enviado a diversos planetas para frenar la amenaza de los tiránidos. Contra estos enemigos insectoides, Titus tendrá que emplear tanto armas a distancia como cuerpo a cuerpo. Dicha combinación de diversos tipos de armas resulta en un sistema de combate desenfrenado que hará las delicias de todo tipo de jugador.
El funcionamiento de los ataques a distancia es el típico de cualquier shooter: un gatillo para apuntar, otro para disparar, y un botón para ampliar nuestra visión. Durante los diferentes niveles lineales de la aventura encontraremos varias armas con funcionamientos variados, pudiendo cambiar de arma cada vez que nos encontremos una. También nos toparemos con diversas granadas cuyas explosiones serán la mar de satisfactoria al ver cómo salen los tiránidos disparados por el aire.
En cuanto al combate cuerpo a cuerpo observamos unas mecánicas un poco más complejas que las explicadas con anterioridad. Presionando un botón podremos atacar y, manteniéndolo, realizaremos un ataque fuerte. La combinación de ataques es necesaria para asestar golpes contundentes que acaben con enemigos débiles. Presionando otro botón podremos bloquear los ataques y hacer parry a ciertos golpes. Esquivando ataques y haciendo parrys a tiempo podremos disparar a quemarropa a enemigos marcados. Dichos ataques inflingirán un daño considerable.
La salud de Titus está protegida por un blindaje que cuesta eliminar pero que tarda en recuperarse. Una manera de hacerlo es ejecutar a un enemigo debilitado. Estas ejecuciones son viscerales, salvajes y gore a más no poder, como cabe esperar. Con todos estos elementos sobre la mesa, Space Marine 2 nos deja libres por niveles lineales que hacen que desconectemos nuestras mentes y las enchufemos a la corriente de la acción pura y dura, captando nuestra atención en todo momento con cinemáticas épicas y oleadas interminables de enemigos.
Aparte de la campaña, Space Marine 2 cuenta con otros dos modos de juego: un PvE relacionado con la campaña, y un PvP enfocado a la estrategia. Estos dos modos adicionales presentan un sistema de clases, en el que cada una tiene una habilidad única y estadísticas diferenciadoras. En dichos modos hallaremos cosméticos, que permitirán personalizar la coraza de nuestro marine espacial. La rejugabilidad de la campaña, la cual se puede disfrutar con otros dos amigos, más los otros dos modos de juego, añaden una gran cantidad de contenido y horas de diversión a lo que ofrece la campaña de Space Marine 2, que dura de 10 a 12 horas.
Visualmente es una joya. Todas las partículas, la innumerable cantidad de enemigos presentes en pantalla y los eventos que ocurren constantemente en el juego (explosiones, disparos…) hacen de Space Marine 2 una obra emocionante y atractiva. La calidad del detalle alcanzado en las texturas y modelados es increíble y artísticamente es lo que se espera de un producto de Warhammer 40k: una maravilla. Aunque para la versión de Ps5 he encontrado bajadas de fps que entorpecen en ocasiones la experiencia de juego, no deja de ser una magnífica que entra por los ojos sin vacilar. Mientras disparamos, despedazamos tiránidos o ponemos rumbo a nuestro próximo objetivo, escucharemos una banda sonora espectacular que acompaña bien a la estética espacial del título.
Warhammer 40k: Space Marine 2 me ha ayudado bastante… a escribir la conclusión de este análisis. La simplicidad que presenta frente a la complejidad de la actualidad me ha hecho recordar que no hace falta calentarse la cabeza cuando está todo dicho y este juego ya lo dice todo con sus primeros minutos de gameplay: que va a ser una aventura bestial y brutal donde no te vas a aburrir. Simplemente eso. Simplemente efectivo.
Gracias 2024 por regalarnos uno de los mejores multijugadores en años, y gracias Space Marine 2 por regalarnos un mensaje simple entre tanta sangre, sesos y vísceras. ¡Bendita simplicidad y bendito Emperador!
Este análisis ha sido posible gracias a una clave que ha facilitado Plaion España a VidaoPantalla.