Silent Hill 2, el impulso necesario para revitalizar la saga

Tras adentrarnos en las más profundas tinieblas de Silent Hill y salir airosos de ellas, tenemos claro que este siniestro pueblo esta más vivo que nunca.

Con el lanzamiento de este juego conviene repasar una frase que se nos olvida con regularidad “no juzgues antes de tiempo o de conocer”. Silent Hill fue lapidado antes de tiempo en redes sociales tras sus primeros trailers sin ni siquiera haber jugado y ahora nos ha dado una lección demostrando que nada de lo que se decía era ni real ni justo. Es cierto eso sí que la manera en que se enseñó el juego en sus primeros trailers quizás no fue la más acertada, pero aún así conviene recordar la lección, en este caso ha salido bien gracias a que la crítica ha sido bastante unánime realzando el juego, pero no sería la primera vez que un buen juego se ve abocado al fracaso por nuestros juicios sin fundamentos.

Recientemente Konami esta intentando poner en el punto de mira sus sagas insignia tanto para las nuevas generaciones de videojugadores como para los más nostálgicos. Próximamente tendremos el remake de Metal Gear Solid 3, pero por el momento le ha tocado a Silent Hill que ahora nos trae su remake de la mano de Bloober Team. Ya hace unos meses tuvimos una experiencia corta y gratuita que se llama The Short Message, en teoría Annapurna (remarcamos el “en teoría”, ya que Annapurna esta pasando por su peor momento) esta haciendo su propia versión de Silent Hill con Townfall y por último NeoBards nos traerá Silent Hill f, una nueva entrega de la saga principal. Todo parece indicar que Konami ha puesto toda la carne en el asador para que volvamos a este mítico lugar una y otra vez.

En esta ya icónica entrega, encarnaremos a James, un atormentado viudo, que se encuentra en Silent Hill en búsqueda de María, su mujer, después de recibir una carta de esta tres años después. Obviamente nada esta como lo recuerda James que no volvía a la localidad desde su viaje con María. 

El mejor juego de Bloober Team hasta la fecha

Os lo adelantamos desde ya, pero el remake de Silent Hill 2 nos ha parecido el juego más redondo y pulido del estudio polaco. No es perfecto, pero moderniza el juego de manera sublime. 

Las comparaciones son odiosas, pero de la misma manera que hizo en su día el remake de Resident Evil 2, aquí cambiamos las cámaras fijas por una cámara al hombro mucho más cercana y que nos permite vivir la tensión de una manera diferente al original, mientras que en el de 2001 jugaba con que no pudieses mover la cámara y no supieses que había después de cada esquina, aquí juega con unos gráficos de infarto y una mayor cercanía al enemigo.

La ciudad sigue siendo la gran protagonista del juego. Hay ligeros cambios en el mapa para que tenga más sentido la nueva perspectiva, pero se mantiene fiel a lo que conocemos. La ya famosa niebla se ha convertido en todo un sello de identidad, quien diría que lo que en su día fue añadido por limitaciones técnicas de la época, se convertiría en un elemento tan diferenciador. En esta nueva versión la niebla es de las mejores que hemos encontrado en un videojuego, densa e impenetrable que apenas nos deja ver a un par de metros delante nuestro, tensándonos al escuchar sonidos cerca sin saber con certeza de donde provienen. 

Recorrer sus calles sigue siendo un gusto, con un mapa en el que James va anotando los descubrimientos, localizaciones importantes, caminos sin salida o puertas cerradas, lo que nos facilita mucho nuestra travesía. Los interiores también han sido ligeramente rediseñados de una manera sublime, donde pasaremos mayor parte del tiempo y los mejores momentos del juego, provocando una sensación claustrofóbica que nos producirá un gran alivio cada vez que salgamos de nuevo al exterior. Este rediseño del mapa nos da la sensación de tener bastante libertad, lo cual es gratificante, aunque la realidad es que generalmente solo tenemos un camino o dos por el que ir, sigue siendo un diseño guiado en el que no tenemos mucha elección, pero la buena mano de Bloober en el diseño nos da esta percepción de libre voluntad. También nos encontraremos por la ciudad algunos edificios nuevos a los que podemos entrar mientras transitamos sus calles. 

Siguiendo con los pequeños cambios, el combate se siente muy diferente a la obra original al cambiar la perspectiva de la cámara, siendo este ahora mucho más cercano y cruento, simple, pero efectivo. Continúa siendo tosco y algo torpe, James nunca ha sido el más atleta. A pesar de estos cambios las armas y enemigos se mantienen intactos, con una pequeña variación y es que algunos enemigos tienen otros patrones de ataque y no siempre vas a saber cómo esquivar a continuación, haciéndolo más imprevisible, en el buen sentido. Contaremos con dos curaciones, una más potente que la otra. Los puzzles también se mantienen, siendo estos, núcleo central al que volver en los mapas interiores. Nos encontraremos también algún puzzle adicional con alguna recompensa pero nada muy importante. 

Algo que también se mantiene es la exquisitez de su banda sonora, levemente revisionada. Ahora bien para nuestro gusto en esta nueva Silent Hill está un poco ausente, es entendible que en muchos momentos se prefiere dejar el silencio absoluto para que podamos apreciar cualquier sonido de monstruos cercanos para así aumentar la tensión, pero desaprovecha un poco la banda sonora que brilla cuando suena sobre todo en cinemáticas. 

Antes de entrar en el apartado técnico tenemos poco que añadir de una historia que tiene más de veinte años, pero que sigue siendo una de las más importantes en su género y se mantiene igual de sorprendente. No tiene cambios importantes más allá de alguna variación en el guion y que cada uno es libre de interpretar si prefiere esta nueva versión, pero como decíamos son nimios estos cambios. Al igual que en el juego original es importante leer los documentos y notas que nos encontramos si nos queremos enterar bien de la historia de la ciudad, sus habitantes y de los personajes que nos encontraremos. Si no estamos atentos podemos pasar por alto algún detalle interesante y relevante que aporta contexto sobre todo en la trama de los personajes secundarios, ya que Silent Hill siempre ha sido muy abstracto en algunos momentos y con varias interpretaciones. 

Adentrándonos ya en cuestiones técnicas y gráficas: Silent Hill 2 se ve de escándalo. Los escenarios están llenos de detalle, la niebla tiene volumen y es realista, cuando pasamos al otro plano, el óxido se hace presente y el cambio de escenario palpable y obvio de un simple vistazo, en la obra original se jugaba mucho con los tonos marrones para plasmar el óxido pero aquí la textura es clara. 

Gráficamente destaca tanto que las cinemáticas suelen tener un resultado inferior al del resto del juego, a veces también falla alguna animación o textura. El cambio a la cámara encima del hombro hace que en muchos momentos la cámara pueda fallar, especialmente en interiores donde los pasillos son más estrechos, llegando a incordiar bastante en algún enfrentamiento. Hemos notado algún fallo en iluminación o en la lluvia por ejemplo, hasta el punto que dependiendo del movimiento de la cámara la veíamos desaparecer. Algún charco reflejaba mal el entorno y su iluminación petardeaba. Las interacciones de James se marcan con un circulito que en algunos momentos puede fallar si no te pones en la posición exacta, como puede ser abrir un cajón, estando extremadamente cerca, pero un poco de lado no te deja abrirlo y tienes que reubicarte para estar en la ubicación exacta frente a él.

El juego cuenta con modo calidad a 30 fps pero mayor calidad gráfica y rendimiento a 60 fps pero una menor resolución. En nuestro caso hemos preferido el modo calidad porque se beneficia gráficamente el juego y no creemos que se beneficie tanto de la fluidez, ya que su acción es más pausada, si bien es cierto que quien prefiera 60 frames puede optar por el modo rendimiento, pero sufrirá alguna caida de fps mayor de manera esporádica y se reducen los efectos y la resolución en pantalla. 

El remake se beneficia de PlayStation 5 haciendo uso del Dual Sense, es extremadamente útil en el caso de la vida que utiliza colores para indicar tu estado de salud, incordia mucho menos que las franjas rojas de sangre que aparecen en pantalla. También utiliza el altavoz para hacer el sonido de radio que nos indica cuando hay un enemigo cerca, un gran acierto y que nos causa una mayor tensión, aunque en algunos momentos puede ser pesado de más, en algunas ubicaciones el sonido es constante y se hace cargante. También sentiremos la vibración háptica del mando en momentos como la lluvia. En resumen saca provecho del mando haciéndolo mucho más inmersivo en conjunto global.

A nivel de duración, gracias a su nuevo diseño prácticamente se duplica respecto a la obra original, llegando a ser entre 15 y 20 horas, según lo mucho que te guste explorar, a pesar de que alguna zona se puede hacer larga. El juego cuenta con ocho finales, pero más allá de querer desbloquearlos no cuenta con mucha mayor rejugabilidad, también desbloqueamos variaciones gráficas y trajes.

Silent Hill ha sido y es un referente en el género, no solo por su terror más directo sino también porque desata un terror psicológico muy único en los videojuegos debido a la niebla y el sonido de interferencias en la radio, hay algo ahí afuera, pero no sabes donde, no puedes verlo. Recomendamos a todo el que no jugara al original probar un juego que marcó una época y a los que jugaron este remake aporta cambios suficientes y lo moderniza como para justificar volver a su mundo. Ahora mismo lleva más de un millón de copias vendidas, esperamos que Konami sepa ver el potencial que tiene la saga si se deja en buenas manos y se le da un poco de amor y cariño. El juego ya esta disponible en Ps5 y PC, con exclusividad en consolas por lo menos un año.

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