El pasado 31 de enero tuvimos por fin la oportunidad de jugar a Song of Nunu en Xbox y PlayStation, juego que ya había salido el 1 de noviembre de 2023 en PC y Switch.
Nos encontramos con otro juego basado en el universo de League of Legends y que forma parte de los llamados “A League of Legend Story”, y que buscan expandir la historia en otros géneros y que ya han hecho otros juegos anteriores como Ruined King, Hextech Mayhem, The Mageseeker y Converge, entre otros, que ya han sido anunciados.
Song of Nunu: A League of Legends Story está desarrollado por el estudio español Tequila Works, desarrolladores de juegos como The Sexy Brutale, Rime o Gylt que anteriormente había sido un juego exclusivo de Google Stadia.
Nuestro Drako ya analizó este juego en su momento en versión para Switch pero como nos gusta saber diferentes opiniones, en este caso voy a hablar de mi experiencia jugando en Xbox.
La historia comienza con Nunu, un niño de la tribu Nonai, que deberá embarcarse en una aventura para encontrar a su madre y llegar hasta las montañas aladas. No es una tarea fácil para un niño, pero afortunadamente cuenta con la ayuda de su amigo Willump, el último yeti, juntos forman un duo que se complementa a la perfección.
Aunque en Song of Nunu tenemos dos personajes principales, la experiencia está diseñada exclusivamente para un solo jugador. Al igual que en Brothers: A Tale of Two Sons, tenemos la capacidad de alternar entre los protagonistas en momentos clave o colaborar con nuestro compañero controlado por la inteligencia artificial. En general, esto funciona bien, aunque ocasionalmente puede resultar un tanto incómodo.
El juego también cuenta con pequeñas referencias y personajes que encantarán a los fans de League of Legends, como por ejemplo encontrarnos con personajes conocidos como Braum, el héroe de Freljord.
Song of Nunu tiene un estilo gráfico muy único y parece en todo momento que estamos viendo una película de Pixar y está todo repleto de pequeños detalles. Con una duración de unas siete horas, nos ofrece una gran aventura y proporciona entretenimiento de calidad en todo momento.
Como ya he comentado anteriormente, Song of Nunu no es una aventura cooperativa. En su lugar, la interacción entre Nunu y Willump tiene lugar de forma automática o se muestra a través de las escenas que se intercalan a lo largo del juego. El juego en sí es sorprendentemente versátil: básicamente controlamos a Nunu o Willump desde una perspectiva en tercera persona. Con Willump, el yeti, podemos correr, pero también dar puñetazos o trepar. Mientras que Nunu tiene habilidades especiales y usa su flauta para activar mecanismos, por ejemplo, o toma prestadas las habilidades elementales de Willump para congelar lagos.
El gran punto fuerte de Song of Nunu es, sin duda, su versatilidad. Aunque la aventura en si ofrece poco que sea realmente nuevo, es entretenida y fácil de jugar en todo momento. En un momento estamos escalando paredes y saltando por plataformas, y al siguiente estamos usando la flauta de Nunu para tocar secuencias de notas y así completar un puzle. Entre medias, los interludios del juego rompen un poco la acción: por ejemplo, nos deslizamos montaña abajo con Willump y tenemos que esquivar obstáculos, o hay una breve pelea de bolas de nieve entre los amigos.
Song of Nunu no es un juego especialmente difícil, la aventura no nos pone obstáculos en forma de puzles que nos tenga pensando que hacer durante horas, en su lugar, introduce las diferentes posibilidades paso a paso y aumenta poco a poco el nivel de dificultad. Con observar bien todo y pensar un poco y, sobre todo, buen timing, todo puede resolverse sin problemas. Willump y Nunu se separan una y otra vez, pero sólo para que uno pueda despejar el camino al otro con sus habilidades individuales. Song of Nunu no es ni rompedoramente innovador en su diseño de niveles ni en el de puzles, pero se nota que han trabajado bien la parte de acción-aventura para que no llegue a ser aburrida ni tenga una exigencia excesiva.
La parte que menos he disfrutado ha sido con los combates, son sin duda la característica del juego que menos destaca. Con Willump, golpeas contundentemente a lobos y otros enemigos, y también puedes usar movimientos especiales. Los controles no funcionan tan fluidamente como en la parte de plataformas, y la perspectiva de la cámara tampoco acompaña siempre.
Por último, destacar la banda sonora del juego que creo que es una de las mejores cosas del juego, con temas muy épicos que podemos disfrutar durante la aventura.
En conclusión, Song of Nunu es un juego enormemente entrañable y que rebosa emoción durante toda la aventura. La jugabilidad ofrece mucha variedad: tanto en la exploración del mundo del juego y con los puzles ambientales ingeniosamente incrustados lo que lo hace muy atractivo. Los puzles musicales intercalados encajan perfectamente con los personajes y son un agradable cambio de ritmo en comparación con las partes de escalada y combate. Un juego muy recomendado tanto si eres fan de League of Legends como si no y que seguro que disfrutaras.
Este análisis ha sido posible gracias a un código proporcionado por Tequila Works.