Desde hace un par de años me ha interesado escribir sobre videojuegos, dar mi opinión y escuchar otros puntos de vista. Hasta que empecé a escribir hace un par de meses en VidaoPantalla siempre me había encontrado un gran obstáculo a la hora de escribir (a parte de mi habilidad sobrenatural para no hacer nada) y ese es la sensación de que me falta información.
Personalmente trato de informarme todo lo que puedo sobre lo que ocurre en el mundo de los videojuegos y, atendiendo a mis circunstancias económicas y de compromisos, intento jugar cosas muy distintas para tener más perspectiva a la hora de opinar. Aún así siento que mi punto de vista es en la mayoría de las ocasiones muy limitado, no he jugado las grandes obras de la industria, ni las actuales ni las del pasado, no sé que se siente al usar unos controles de tanque, tengo un desconocimiento total acerca de diversos géneros como los shooter, las aventuras gráficas o los juegos de terror… Se podría decir que no tengo ni idea de nada.
A lo que quiero llegar es que estas lagunas son preocupantes, y llenarlas, en este caso, es muy difícil ya que requiere de muchas horas de jugar, documentarse y reflexionar. Este es un problema que tiene cualquier persona que se quiera introducir en cualquier campo, pero, tras pensar un poco, creo que la naturaleza de la industria del videojuego y de nuestra sociedad actual hace que este problema se magnifique aún más en el caso de las personas a las que nos gusta, o gustaría, escribir sobre videojuegos.
A la hora de opinar sobre cualquier cosa en esta vida hay clara una cosa: uno tiene que saber del tema del que está hablando, de lo contrario lo único que se hace es soltar argumentos vacíos que no dan lugar a nuevas ideas ni interpretaciones y, en muchas ocasiones, desinforman a la gente. Por lo tanto, a medida que vamos creciendo como escritores en portales como Vidaopantalla, tenemos que ampliar nuestra mira y, al mismo tiempo que comentamos la actualidad, debemos revisar y jugar por primera vez no tan solo los clásicos, sino también otros juegos más antiguos que nos llamen la atención o tengan algo digno de mención.
Si hay algo en este medio es mucho contenido, mucho a lo que jugar, mucho sobre lo que reflexionar, muchas personas involucradas en él… En general, mucho de todo y poco de nada. Hay tanto que en algunas ocasiones resulta abrumadora la cantidad de trabajo que aquellos que tratamos de ponernos al día tenemos atrasado. Por supuesto, no se puede pedir que todas las personas jueguen a todos los videojuegos de una lista que se consideran ‘imprescindibles’ para ‘conocer el medio’, cada uno tiene sus preferencias y sus manías personales, por lo que esta es una lista, potencialmente, interminable.
Con esto no quiero decir que si opinas sobre un videojuego sea tu obligación dar una información cien por cien contrastada y objetiva, ni mucho menos. Este texto es más bien una declaración de intenciones, una carta para mí mismo y ¿por qué no? si estás comenzando a escribir sobre videojuegos como yo, para ti también. Lo más importante es conservar la ilusión por jugar y difundir, por hablar con gente, por escuchar su opinión y por escribir.
Del mismo modo que este desfogue me ha servido a mi para aclarar mis ideas a la hora de escribir y por ello, espero escuchar vuestras opiniones si habéis llegado hasta el final de este texto. Si mis palabras os han dado esa confianza que necesitabais para redactar en una web sobre videojuegos podéis visitar nuestro artículo sobre como uniros o contactar con nosotros via Twitter, ya que siempre estamos buscando gente para agrandar esta comunidad llamada VidaoPantalla.