The Last of Us es uno de los títulos más aclamados de la pasada generación de consolas y está considerado por muchos como el mejor juego de Naughty Dog, que después de deleitarnos con la trilogía de Uncharted de PS3, apostó por esta nueva IP que mezcla Acción y Aventura con Survival Horror. Después de mucha espera por parte de los fans de la compañía desde su anuncio (2011) hasta su lanzamiento (2013), sobrevivió a las altas expectativas generadas por sus trailers. Hoy os traemos el análisis de lo que ha sido una de las mejores aventuras que nos han brindado los videojuegos.
Un viaje inolvidable
The Last of Us se desarrolla en un mundo post-apocalíptico que lleva 20 años sufriendo las consecuencias de un hongo llamado Cordyceps, que anula la capacidad de raciocinio de un ser humano poco después de que éste se infecte y lo hace extremadamente agresivo. Nuestro protagonista, Joel, vive gracias al contrabando de armas que lleva a cabo con su socia, Tess.
Al poco de empezar la aventura, Marlene, la líder de un grupo opuesto al duro régimen militar que se implantó después del nacimiento de la pandemia conocido como Los Luciérnagas, encarga a Joel y Tess que lleven a Ellie, una chica de 14 años de la que no sabemos nada, a un capitolio situado relativamente cerca de donde se encuentran, donde un grupo de luciernagas estará allí para recogerla. Y este es el comienzo de un espectacular viaje.
No contaremos más de la historia, ya que es sin saber nada, de principio a fin, como más se disfruta. Esta entrega tiene una de las ambientaciones más logradas en los videojuegos, ya que Naughty Dog consiguió plasmar a la perfección como sería el mundo real después de años de una pandemia tan devastadora. Esto también se aplica a Ellie, y es que Neil Druckmann se aseguró de que se notase en su guión que nació después de la expansión del Cordyceps, es decir, que no conoció el mundo como lo conocemos nosotros.
El argumento se desarrolla de manera lenta y calmada, especialmente durante la primera mitad de juego, pero no está alargado artificialmente ni tiene relleno. No esperéis que la historia saque todas las cartas que tiene sobre la mesa nada más empezar el juego, pues es a lo largo del mismo donde se descubre la maravilla argumental que es The Last of Us. Tampoco es recomendable tener la expectativa de que su historia es especialmente original, ya que esta tiene bastantes clichés, y no solo por los zombies. No daremos ejemplos porque, a pesar de ser clichés serían, obviamente, spoilers. Eso sí, los diálogos que se dan entre los personajes mientras vamos de un punto A a un punto B no son simples conversaciones que están ahí solo para que no te aburras mientras andas mucho. Resultan imprescindibles para ver con más detalle como evolucionan las relaciones de los personajes y como cambia su trato entre ellos conforme avanza la aventura, siendo mejores de lo que estamos acostumbrados a ver en este tipo de diálogos fuera de cinemáticas.
Joel y Ellie
Y os preguntaréis: Si la historia parte de una base genérica y hay muchos clichés, ¿por qué está tan sumamente bien lograda? La principal clave está en sus protagonistas, Joel y Ellie. Y es que no exageramos si decimos que están entre los mejores protagonistas que nos han brindado los videojuegos en toda su historia.
Es difícil explicar porque están tan bien escritos sin entrar en detalles de la historia principal. Joel ha tenido que ver durante los 20 años de pandemia lo más crudo y repugnante de la humanidad; sabe mejor que nadie que los contagiados por Cordyceps no son la única amenaza. Esto, sumado a su pasado tremendamente infeliz y tormentoso, lo hace un personaje introvertido y cerrado a encariñarse demasiado con cualquier persona. La evolución que Ellie provoca en la personalidad de este complejo personaje y en sus emociones se plasma de manera perfecta en su guión y en sus acciones, lo que lo convierte en un personaje con un desarrollo espectacular, de principio a fin.
Ellie es la representación de una inocente adolescente de 14 años que no ha conocido el mundo como era antes. No es tonta para nada, todo lo contrario, pero se hace muy notorio que no ha visto en los humanos lo que Joel ha visto, especialmente poco después de encontrarnos con ella. Es muy carismática y alegre, y resulta especialmente sorprendente, tanto para el jugador como para el resto de personajes del juego, el optimismo que tiene a pesar de vivir en el mundo en el que le ha tocado vivir.
Es por estos dos personajes por los que la trama de The Last of Us es una de las mejores de los últimos años. No esperéis una historia que rompa con lo establecido o desprenda mucha creatividad. Más que eso, The Last of Us es el viaje que realizan sus protagonistas y la evolución que tienen gracias a la gran relación que se establece entre ellos, con un guión y unas actuaciones que están entre las mejores de la historia del videojuego.
Un mundo devastado
Y los protagonistas no son la única razón de la brillantez argumental del juego. La narrativa (que, recordamos, es cómo se cuenta una historia) es otro elemento que sobresale en The Last of Us. No hace uso de música o escenas muy dramáticas para transmitir al jugador tristeza cuando sucede algo malo ni usa siempre el guión para transmitir las emociones de los personajes, especialmente con Joel y Ellie; no lo necesita, pues hace ambas cosas de maravilla. Es en el final del juego donde más se nota esto, pues es el broche de oro de esta historia llena de emociones que resultará especialmente impactante para la mayoría de los que lo jueguen.
La genial narrativa de este título de la pasada generación de consolas no se limita solo a la historia principal. Naughty Dog logró diseñar como sería un planeta Tierra post-apocalíptico y como se comportaría una sociedad que vive en estas difíciles condiciones de manera sublime. Militares ahorcados en ciudades donde un grupo organizado tomó el control de esta, cartas en las que se explica que les ocurrió a varias personas que se refugiaron en unas alcantarillas poco después del inicio del brote, y muchos ejemplos más que no mencionaremos para que los descubráis por vosotros mismos. En resumen, el mundo de The Last of Us se siente vivo y orgánico.
No pasaremos horas explorando, pero si que nos podremos desviar casi siempre del camino principal para explorar una casa o un local. Lo justo para poder distraernos un poco sin cortar el ritmo. Eso sí, muchas veces registraremos una casa entera sin encontrar absolutamente nada, lo que le aporta realismo a la experiencia; los recursos no están por todas partes. Aparte de encontrar suministros, de los que hablaremos en detalle más adelante, también encontraremos coleccionables. Los hay de 4 tipos: artefactos, manuales de entrenamiento, colgantes de luciérnaga y cómics. Estos dos últimos son simples objetos que están ahí solo para aumentar la exploración, sin ninguna otra aportación destacable, pero si que merece la pena explorar para encontrar los artefactos, ya que la mayoría son muy interesantes; por ejemplo, audios o cartas, a veces de personajes secundarios, aportando más a la historia, y a veces de personajes externos a la historia, que aumentan el lore del juego. Por último, los manuales de entrenamiento potencian las habilidades de Joel, como hacer que una misma daga se pueda usar dos veces y no una antes de que se rompa.
Agonía
Esta es la palabra que mejor define lo que se siente durante una buena parte del tiempo de juego. Y esto está bien, ya que es, en parte, un Survival Horror, preocupante sería si no se pasase algo mal. Especialmente en las dificultades más altas, los recursos son limitados, y hacer una buena gestión de estos es primordial para avanzar en la aventura. No podemos liarnos a tiros con cualquier cosa que se mueva como en Uncharted; acabaríamos con toda nuestra munición en cuestión de minutos.
Hay dos formas de avanzar: con acción bruta o con sigilo, la más recomendable. Elegir de que manera avanzamos en cada zona es nuestra decisión, pues a veces es mejor ser sigiloso y otras esto resulta especialmente difícil. Además hay, principalmente, dos tipos de enemigos: los infectados por Cordyceps y los humanos, y la estrategia más recomendable a seguir suele ser diferente dependiendo de si nos enfrentamos a unos o a otros, aunque siempre tenemos las mismas opciones y una gran variedad de herramientas para deshacernos de nuestros enemigos. A pesar de esto, no es difícil aprender a jugar, ya que los tutoriales lo explican todo detalladamente y se pueden consultar siempre que lo necesitemos.
Los dos tipos de infectados más abundantes son los corredores, que llevan poco tiempo contagiados, tienen capacidad de visión y, como su propio nombre indica, son rápidos, aunque suelen estar quietos si no llamamos su atención, y los chasqueadores, que, como consecuencia de llevar mucho tiempo contagiados, les han crecido unos hongos en la cabeza, lo que los hace ciegos, pero son especialmente sensibles al sonido, tanto que se podría decir que ven con él, así que tendremos que ir despacio incluso agachados. Para combatir a estos enemigos el sigilo es lo más recomendable, ya que consume muchas balas matar a los chasqueadores y estos nos matan de un solo golpe, aparte de que resulta relativamente sencillo matarlos acercándose sigilosamente por detrás, ya sea estrangulándolo o con una daga, o superar una zona sin matarlos a todos o, incluso, a ninguno.
Por otra parte, están los humanos. Ser sigiloso aquí es más complicado, ya que están bien organizados cuando son muchos y nos detectan más fácilmente que los infectados. Habrá que hacer mucho uso de coberturas para que nos quiten la menor vida posible y tener buena precisión, pues es vital disparar a la cabeza para ahorrar toda la munición que sea posible.
Además de las armas, otras herramientas que tenemos son botiquines para curarnos (no, la vida no se regenera de manera automática), cócteles molotov, bombas de clavos, bombas de humo y dagas. Todas ellas se consiguen fabricando, gracias a objetos como alcohol o cuchillas que nos encontraremos explorando. Por ejemplo, podremos fabricar una bomba de clavos con cuchillas y explosivos. Hay que destacar que la acción no se interrumpe mientras fabricamos ni mientras nos curamos con botiquines, lo que hace la experiencia de juego más realista y tensa. Otro medio para ayudarnos en los combates son las armas cuerpo a cuerpo. Las hay desde palos de madera hasta hachas, y todas ellas son más efectivas que ir a puñetazo limpio y pueden mejorarse en el menú de fabricación. Eso sí, después de cierto número de usos, se rompen. Por último, disponemos de botellas de cristal y ladrillos, que podremos usar para lanzárselo al cuerpo de los enemigos para aturdirlos por unos breves instantes o, lo más interesante, para lanzarlo a una sitio y que nuestros rivales vayan ahí, ya sea para eliminar a varios con un solo cóctel molotov o para avanzar sin ser detectados, especialmente con los chasqueadores, ya que el sonido es, como ya hemos dicho, su forma de ver.
Buscando suministros también encontraremos suplementos en forma de pastillas, frascos y plantas medicinales que nos permiten mejorar habilidades de Joel como, por ejemplo, la salud, y las partes, que se utilizan para mejorar nuestras armas (aumentar velocidad de recarga, reducir retroceso, etc.)
Contamos con una mecánica llamada Modo Escucha, que nos permite agacharnos y escuchar detenidamente para saber la posición exacta de nuestros enemigos. Esta tiene un alcance relativamente corto, lo que hace de esta mecánica una ventaja muy importante, pero no algo que ponga las cosas excesivamente fáciles. A pesar de esto, os recomendamos desactivarlo, ya que no saber la posición de los enemigos hace de la experiencia algo más tenso, teniendo que estudiar muy bien el entorno antes de dar un paso, e incluso más terrorífica, pues puede que te lleves un susto si entras a una habitación y ves a un chasqueador justo en frente de ti.
Todas estas mecánicas y opciones de las que disponemos en nuestros combates construyen una jugabilidad equilibrada, entretenida y muy bien pensada, que consiguen el objetivo de que, a pesar de que pasemos muchas horas de juego esquivando infectados o enfrentándonos directamente con otras personas, no nos aburramos, pues deberemos hacer uso de todas las herramientas que este título nos brinda para avanzar, obteniendo una sensación de evolución y aprendizaje constante. Es importante destacar que contamos con 5 dificultades. Podemos optar por la más fácil si solo queremos disfrutar de la historia, por la normal si queremos una experiencia que nos de algo de reto pero que no nos haga pasarlo excesivamente mal, o por las más difíciles si buscamos que el juego nos obligue a pensar muy bien como gestionar los recursos. Da igual que tipo de jugador seas, habrá una dificultad que sea la adecuada para ti.
La mayor pega que tiene el juego son sus rompecabezas. Resulta decepcionante que, después de ver los buenos resultados de la saga Uncharted en este apartado, The Last of Us cuente con unos puzzles que pecan de sencillos y repetitivos, pues la mayoría de ellos consisten en mover una escalera de un lado a otro o mover a Ellie en una tabla de madera en espacios acuáticos, ya que no sabe nadar. Unos puzzles muy complicados quizá no pegarían bien con el tono del juego, pero su simpleza es excesiva y su repetitividad inexcusable.
Una maravilla audiovisual
El apartado visual es espectacular. Resulta casi increíble que un juego de la pasada generación luzca tan bien, tanto en nitidez como en iluminación. Y a pesar de que su estilo visual, el realismo, es muy frecuente en la industria actual, su personalidad permite reconocer al juego al ver una imagen de él, cosa que no es nada fácil. Este es el resultado de no centrarse exclusivamente en lo técnico, ya que también se aseguraron de que los escenarios y entornos estuvieran espectacularmente bien detallados. Todo esto mejora aún más si lo jugáis en su versión remasterizada de PS4, donde lo podréis disfrutar a 1080p y a 60 fotogramas por segundo (también podéis fijarlo en 30 si preferís una sensación más cinematográfica).
No cesan las buenas noticias en el apartado sonoro. La banda sonora, en la que es muy frecuente el uso de la guitarra, está compuesta enteramente por el argentino Gustavo Santaolalla, compositor de muchas películas como Babel o El libro de la vida. Es tranquila, calmada y, sobre todo, minimalista, lo que para nada reduce su calidad. No pegarían con el tono pesimista del juego melodías epiquísimas y muy dramáticas y, al fin y al cabo, consigue su objetivo, pues todos sus temas acompañan muy bien en los momentos en los que suenan, ya sea en los de tensión y sigilo o en las conmovedoras y espectaculares escenas. Esto se traslada al sonido en general, y es que los efectos de sonido están logrados como en pocos videojuegos. La única pega es que si nos alejamos de un personaje y este está hablando, baja la intensidad con la que se le escucha, lo que hace más realista al sonido y ayuda a saber a que distancia se encuentra un enemigo cuando lo oímos hablar o hacer un ruido, pero podríamos no entender lo que dice un personaje si nos alejamos mucho. Además, cuenta con un muy cuidado doblaje al español de gran calidad.
Conclusiones
Con una jugabilidad muy disfrutable y bien construida que mezcla acción y sigilo, una historia que no dejará indiferente a nadie y que marcará a muchos, una banda sonora que acompaña a la perfección, unos gráficos espectaculares y una dupla protagonista, Joel y Ellie, con un guión sublime, The Last of Us es una obra maestra. Un videojuego sensacional y una prueba más de que el estudio californiano es uno de los que más calidad ha desprendido en la industria del videojuego en el siglo XXI. Una experiencia que no olvidarás, solo lastrada por sus malos rompecabezas.
La duración varía mucho en función de la dificultad en la que juegues, tu habilidad y el tiempo que dediques a explorar, pero se podría decir que dura, como mínimo, 14-16 horas. También cuenta con un DLC llamado Left Behind, que está disponible en el remaster de PS4. Todo lo que se ha dicho en este análisis es aplicable a dicha expansión, pues es, al igual que el juego base, una maravilla, con una duración de 2-3 horas, que expande la historia del juego original y nos hace entender a la perfección que ocurrió en dos momentos clave del juego, además de poder conocer más al personaje de Ellie.
Si queréis estar informados sobre la esperada segunda parte, en VidaoPantalla tenemos todas las noticias relacionadas aquí.
Nota general: 97
Historia - 10
Jugabilidad - 9
Gráficos - 10
Sonido - 9
9.5
Con una jugabilidad muy disfrutable y bien construída que mezcla acción y sigilo, una historia que no dejará indiferente a nadie y que marcará a muchos, una banda sonora que acompaña a la perfección, unos gráficos espectaculares y una dupla protagonista, Joel y Ellie, con un guión sublime, The Last of Us es una obra maestra. Un videojuego sensacional y una prueba más de que el estudio californiano es uno de los que más calidad ha desprendido en la industria del videojuego en el siglo XXI. Una experiencia que no olvidarás, solo lastrada por sus malos rompecabezas.