[Análisis] Shaq Fu: A Legend Reborn

Shaquille O’Neal está de regreso en Shaq Fu: A Legend Reborn, una entrega que ha llegado gracias al esfuerzo y la financiación colectiva. ¿Podrá esta nueva entrega superar el desastre de 1994?

Tras ser encontrado flotando en un río apenas siendo un bebé, el buen Shaq Fei Hung tiene que lidiar con el abuso de sus compañeros ¿su pecado? ser diferente. Por suerte ser diferente es lo que hará que algún día Shaq Fei Hung logre salvar al mundo de las garras de Hollywood.

Entrenado en artes marciales por un misterioso anciano, Shaq Fei es testigo de como hordas de enemigos atacan su aldea natal, todo para conseguir algo. No sabe de que se trata, no sabe que es exactamente lo que tiene que hacer, pero una cosa es clara. Han osado atacar su aldea natal, y el jamás se los perdonará. Es así como entramos en el que es el primer nivel del juego, un nivel que nos sirve a modo de tutorial y para ver por donde irán los tiros.

Una vez en situación nos tocará enfrentarnos a enemigos que aparecerán por ambos lados de la pantalla, podemos eliminarlos a base de golpes rápidos, combinar golpes rápidos con uno fuerte o también utilizar el entorno como nuestra arma. Además de esto, también contamos un dash capaz de aturdir a los enemigos más débiles y encajar golpes nos ayudará a cargar una barra de energía, la cual una vez cargada nos permitirá desatar un combo devastador que eliminará a todos los enemigos a nuestro alrededor.

También nos encontraremos con power-ups de los más bizarros, estos power-ups nos permitirán convertir al protagonista y una máquina, en un cactus y en alguna sorpresa más. La única pega es que estos aparecen en momentos puntuales y no podemos activarlos en cualquier momento, pero estamos aquí para repartir golpes y eso es lo que importa.

A lo largo de los seis niveles, viajaremos buscando a las marionetas de Hollywood, en el camino nos enfrentaremos a musculitos, guardaespaldas, fans histéricas e incluso a abogados chupasangre y ninjas. Los jefes finales a los que nos enfrentaremos tienen cierta gracia y  reflejan muchos de los tópicos que podemos ver en Hollywood, cada uno de ellos puede ser derrotado aprovechando las habilidades o el escenario, pero también podemos optar por derrotarlos a puñetazo limpio.

En el apartado gráfico el juego cumple. Atrás ha quedado ese desastre de 1994 y la verdad es que, aunque en un principio se hace algo «raro» la estética del juego está muy lograda y a Shaq le sienta bien. Para los más observadores y para las más observadoras, el juego cuenta con muchos guiños y parodias a Hollywood y al propio Shaquille. Sorprendentemente, la acumulación de enemigos en pantalla o de golpes y combos NO genera bajones de frames, lo cual es de agradecer en un Beat ‘em up.

El apartado sonoro del juego está muy logrado y llega a destacar, la banda sonora del juego es animada sin llegar a ser cansina, los sonidos están bien implementados y encajan perfectamente dentro del juego al que estamos jugando. Además de esto los actores de voz no están mal, reflejan perfectamente al personaje que les ha tocado interpretar (incluyendo manías y tópicos) y como extra, es el propio  Shaquille O’Neal quien pone voz a Shaq Fei. 

Como extras tenemos a la Shaquipedia, una pequeña enciclopedia dedicada a describir y contarnos un poco sobre todos los enemigos y objetos que encontremos en  nuestro viaje y que nos permitirá revivir las secuencias de vídeo del juego. También podemos cambiar la dificultad del juego en cualquier momento desde el menú de carga (el cual nos permite tener 3 checkpoints por cada uno de los niveles).

Y ahora sí, es la hora de los puntos negativos. En primer lugar tenemos el hecho de que la carga inicial del juego es MUY lenta, le toma un minuto o minuto y medio para iniciarse (eso sí, pasado esto, los tiempos de carga que encontremos serán muy cortos. No sabemos si esto se podrá corregir en un futuro, pero esperemos que sí. El juego tampoco permite el juego con un amigo/a más, lo cual es una pena ya que tiene potencial para ser mucho más divertido entre dos personas.

También está el hecho de que algo tan maravilloso y creativo como los power-ups con los que cuenta el juego no se pueda utilizar cuando queramos (Yo quiero convertirme en cactus cada vez que sea posible). Salvo el primero, el resto de puntos negativos no influyen en la experiencia jugable.

Y esto es Shaq Fu: A Legend Reborn, no es un juego perfecto y tiene sus carencias, pero es un juego entretenido que compensa a los fans del mítico Shaquille O’Neal y a videojugadores/as por el desastre de 1994. Un buen título para divertirse y echarse unas risas, pero eso sí. Os advertimos de que su humor no es apto para todos y podría incluso resultar un poco ofensivo para algunas personas.

Creado por Saber Interactive, Shaq Fu: A Legend Reborn ya se encuentra a la venta en la eshop de Nintendo Switch a un precio de 19.99 euros y tiene subtítulos en español.

Y recordad, si os habéis hecho con NBA Playgrounds en Nintendo Switch antes del 10 de junio de 2017 podéis haceros con una copia de Shaq Fu: A Legend Reborn completamente gratis. Tan sólo tenéis que ir a la Nintendo eShop y buscar el juego (recordad, estará gratis sólo hasta el 5 de julio).