Historia - 7
Jugabilidad - 9
Gráficos - 8
Sonido - 9
Duración - 8
8.2
Una secuela que destaca por su cambio gráfico y su sonido, pero que se mantiene a raya en otros aspectos como la jugabilidad.
El universo vuelve a estar en peligro.
Guardianes del mundo, es hora de desempolvar vuestras armas, el viajero os necesita más que nunca. Y es que Destiny 2 ya está a la venta, el shooter en tercera persona creado por Bungie y distribuido por Activision para Ps4, Xbox One y PC, aunque para este último aún deberán esperar al 24 de octubre.
La historia de esta nueva entrega empieza en la torre, concretamente en la mesa de reuniones donde Zabala, Cayde-6 e Ikora Rey (representantes de los Titanes, Cazadores y Hechiceros respectivamente) siguen discutiendo como de costumbre. Sin embargo todo se tuerce al presenciar una gigantesca flota de ataque, Ghaul señor de la Legión Roja de Cabal ha llegado. Se produce un fuerte ataque a nuestra base y sin obtener respuesta en nuestra nave, decidimos volver de nuestra misión para averiguar qué pasa. Ghaul está dispuesto a conseguir el viajero y así hacerse con el poder de la luz que resucita al guardián caído para seguir luchando.
Tras esta pequeña introducción, a continuación iremos analizando paso por paso los aspectos de esta secuela, centrándonos en los cambios respecto al primero y no haciendo especial hincapié a su multijugador, pues este se conserva intacto al anterior título:
Sonido cuidado y mejor seleccionado.
Para acompañar esta nueva aventura, una de las mejoras más destacables es sin duda la banda sonora. Una banda sonora mejor seleccionada y cuidada que la primera entrega, acompañando muy bien a cada momento del juego y aventura que estemos viviendo en él. Los chicos de Bungie han conseguido que la melodía de las misiones acompañe tan bien que nos hace sentir aún más dentro de la línea argumental.
Todo un lujo de detalles en forma de shooter.
En el apartado gráfico también hay ciertas cosas que destacar. Lo primero de todo es que Destiny 2 solo sale en la actual generación, no en su antecesora. Y debido a ello y al estar en una generación consagrada se nota un elevado nivel de detalles en los mapas como más obstáculos, vegetación y más detalles en estructuras y vehículos. Además se nota un claro avance en los efectos luminosos en mapeado como las luces del sol, la luna o la tormenta con descargas eléctricas. Pero sin duda, donde más se aprecia esta mejora, es en las explosiones, disparos y fuegos que vemos durante el juego, llevando a otro nivel las batallas que libraremos por los distintos planetas.
Jugabilidad sin cambios.
Sin embargo, una de las partes donde no se ha mejorado, y la verdad es que no se necesitaba, es en la jugabilidad. Y es que Destiny 2, es en ese concepto, igual que el Destiny original. Desde el mismo momento que nos pongamos a los mandos, notaremos que sabremos hacer lo que nos piden en cada momento. Algo bueno sin duda para el fan entregado de la saga, pero que por otra parte puede conllevar al cansancio del jugador ocasional. El gunplay que disponía el juego original ya era tan bueno que los chicos de Bungie han decidido mantenerlo sin pensárselo dos veces. Así mismo como todos sabréis Bungie está más que consagrado con este género ya que fueron los encargados de llevar a cabo los juegos Halo.
Conclusión.
En conclusión Destiny 2 está pensado para satisfacer las necesidades del jugador fan del primero y cansado de no tener una nueva línea argumental, aportando una nueva historia más elaborada, mejor banda sonora y mejoras en los detalles visuales del juego. Respecto a la duración de la historia, acabarla me llevó personalmente 13 horas básicamente, dando algún que otro rodeo debido a que para continuar me exigían llegar a cierto nivel con mi personaje. Además, no considero que sea un juego exigente con el nivel de destreza del jugador (al menos en las misiones de la historia) lo que lo hace mucho más accesible incluso para el que vaya a empezar por primera vez en el universo Destiny. Sin duda es un gran título para todo aquel amante de los shooters en primera persona.