La terrorífica demo de la nueva secuela de Outlast fue todo un éxito: un gran número de jugadores disfrutaron de un pequeño aperitivo que fue calificado como apto en todos los países. Pese a ello, llegando a la fecha de su lanzamiento, donde el nuevo título de Red Barrels se ha dejado ver más, la ACB (Australian Classification Board), organización encargada de clasificar por edades los videojuegos en Australia, ha tomado la decisión de prohibir que Outlast 2 llegue al país oceánico.
¿El motivo? Según cuenta el portal Kotaku, unas escenas protagonizadas por una mujer, donde se aprecian actos sexuales forzados sería el núcleo de su rechazo. Por lo que a la desarrolladora le quedan dos opciones: censurar su juego para que los jugadores austriacos también lo puedan disfrutar, o no dejar que este llegue ahí.
Para el resto de usuarios, de momento habrá que esperar al próximo 28 de abril y juzgar nosotros mismos si ha sido acertada esta decisión. ¿No creéis?