Esta semana este buen señor llamado Dan_Chaos, con el que ya colaboramos en la presentación de Gravity Rush 2 en España, ha vivido una experiencia que nunca olvidará. El fanatismo es sin duda uno de los problemas más grandes en nuestra sociedad, siempre y cuando, por supuesto, sea aplicado a lo extremo. Podemos ser fanáticos del cine, de la literatura, de la música, de los videojuegos… Pero, ¿qué pasa cuando lo llevamos al extremo?
Insultos, guerras, peleas, críticas destructivas, discusiones, polémica… Esta semana nuestra redacción aborda el tema del fanatismo en los videojuegos, ¿qué opinión tienen nuestros colaboradores al respecto?
Shergiock
Esta semana ha sido sin duda la más vergonzosa que he podido vivir en mucho tiempo. Un gran amigo, mi querido Dani de Puerta al Sótano, ha sido víctima de los fanáticos de los videojuegos. Jugadores cerrados de mente que no quieren ver más allá de su consola o compañía favorita. Y han tergiversado las palabras de mi buen amigo para despotricar sobre él.
Yo soy nintendero. Amo Nintendo, y ella, sus consolas y videojuegos siempre serán mi primera opción. ¿Quiere decir eso que odio Microsoft y Sony? No. Porque aunque mis ojos sean para Ninty, no tengo ninguna intención de cerrarlos para el resto (de hecho hace poco adquirí Heavy Rain para PS3 sin tener siquiera la consola). Amo los videojuegos, son mi pasión.
Y no pienso permitir que nadie me impida disfrutar de mi pasión. ¿No te gusta? Me parece correcto, pero no pienses ni por un solo momento que me vas poner una mordaza a mi o a cualquiera. Que lo paséis muy bien con los videojuegos.
Josanguz
En los videojuegos existe también ese fanatismo, no solo en el propio género del octavo arte, sino fans de ciertas sagas de videojuegos o de compañías del sector, y os lo diré claro: es de las más infantiles que se pueda imaginar.
El fanatismo lo único que destruye es lo que amamos la mayoría, que son los videojuegos, que pueden trasmitir, al igual que una película, o un cuadro, sentimientos, sensaciones, te marcan en tu forma de ser. Si por ser fan aférrimo te estás perdiendo joyas hechas juegos que quizás te cambien tu vida… quizás deberías plantearte si este es tu hobby adecuado.
Recientemente, vi un vídeo de mi gran amigo Dan que hablaba sobre este tema en concreto, que cada vídeo que hace, sale alguien criticando de forma destructiva, mediante insultos o desprestigiando el trabajo del sector. Y me quedé con lo que dijo que la verdad estoy bastante de acuerdo con él:
¿Os gustan los videojuegos o no? Aclárate. […] Para mí no hay Sonyers,
ni Nintenderos, ni Xboxers… Aquí hay jugadores. […] Me cansa lo infantiles
que podemos llegar a ser. -Dan_Chaos
Pues lo dicho, a pesar de la mierda que se echa, y a pesar del fanatismo en el mundo de los videojuegos, somos jugadores. No lo olvidéis nunca.
Pablo Wade
Si tengo algún recuerdo especial de los últimos veranos es el mes que paso con mi sobrino, la mejor parte de mis vacaciones. Él jugando en su habitación al Call of Duty, Fifa o Assasin’s Creed de turno mientras yo estoy en la habitación de al lado a lo mío, deseando que me venga a decirme que si echamos una partida. Esos ratos con él, normalmente perdiendo, son irrepetibles, no creo que se me olviden en mi vida.
¿Dónde quiero llegar con esto? ¿Debería existir un conflicto de vieja escuela contra la nueva escuela? ¿Fanboys que matarían por su marca favorita? Hay tiempo para todo, no todo es ni blanco ni negro. Los buenos ratos que me han dado esas sagas que no suelo jugar normalmente no me las dan a las que le dedico tantas horas todos los días y viceversa.
Creo que deberíamos empezar a entender que los videojuegos son una vía de escape para estas vidas que nos han tocado vivir y no una chaqueta que tenemos que llevar puesta pase lo que pase. Vive y deja vivir. Solo vamos a vivir una vez y tenemos que vivir como nos de la gana.
Kyrvic
Susana Bandicoot
Danny G
Un poco de fanatismo nunca viene mal, por mucho que se quejen. No creo que tenga nada de malo que te guste mucho una saga hasta el punto de adquirir todos sus productos, siempre que primero se analice si realmente valen la pena. Sin embargo, cuando explotas dicha saga hasta el punto en que ya no te importan las demás, se convierte en un problema. El rechazo injustificado hace que te pierdas verdaderas joyas jugables por no querer mirar más allá, y es una verdadera pena.
Del mismo modo, obsesionarse con Nintendo y por ello aborrecer a Sony, por poner un ejemplo, también demuestra una falta de interés por el mundo de los videojuegos, por mucho que uno se crea un «friki». A cada uno le puede gustar un género específico y por ello lo explota al máximo, por ejemplo, yo soy adicto a los de plataformas y aventuras/RPG, y en eso Nintendo me parece la más experimentada (aunque Sony y Microsoft también tengan unos cuantos de éstos), por ello no soy muy fan de la competencia, en la que abundan juegos con ambientación mucho más madura y/o oscura y del tipo shooter.
A pesar de ello, si realmente viera un catálogo de juegos de ese género que me interese, compraría la consola sin dudarlo, aunque no fueran de mis sagas favoritas. El problema está, por supuesto, en que no hay dinero para todo y siempre preferimos ahorrarlo para esas sagas. Problemas del primer mundo.
¡Y eso ha sido todo esta semana! Nuestra redacción ya ha dejado clara su postura ante el fanatismo en los videojuegos. ¿Cual es tu postura? ¿Crees que puede haber algo positivo, o siempre será negativo? ¡No olvides dejar tu opinión en los comentarios!