La compra de Oculus hace más de un año por 2.000 millones de dólares por parte de la compañía de Mark Zuckerberg no estuvo exempta de polémica. Muchos no se fiaban de los dudosos usos que podría darle a uno de los gadgets más interesantes de los últimos tiempos, pero con la aparición de los distintos prototipos y los periféricos que lo acompañan parece que han desaparecido parte de esos murmullos y ahora Zuckerberg ha reafirmado el compromiso con esta tecnología en una sesión de respuestas y preguntas. Durante esta sesión de preguntas un usuario preguntó al dueño de Facebook como creía que sería el mundo dentro de 10 años.
“Trabajamos en la VR porque creo que es la próxima gran plataforma de cómputo y comunicación después de los teléfonos», comentó Zuckerberg. «En el futuro probablemente seguiremos cargando nuestros teléfonos en el bolsillo, pero creo que también tendremos lentes en nuestras caras que nos ayudarán en el transcurso del día y nos darán la capacidad de compartir experiencias con nuestros círculos de una forma inmersiva y de nuevas formas que día de hoy son inverosímiles”
Parece claro que esta tecnología va a quedarse con nosotros, las apuestas de Sony, Valve y Oculus son clara muestra de ello y las posibilidades de esta tecnología en distintos campos parecen infinitas, pero aunque esta tecnología va a asentarse no creo que substituya el juego clásico si no que más bien será un complemento de las actuales plataformas de juego que podrá ofrecer distintas experiencias y posibilidades.